martes, 22 de abril de 2014

El Cuento

En la segunda semana los jóvenes estaban en parciales y la asistencia fue poca, sin embargo, con los pocos que llegaron; leímos el fragmentos del Diario de Ana Frank; para asumir con responsabilidad y belleza el oficio de escribir en un diario utilizando nuestro empeño en describir nuestro mundo interior y exterior. Un método que sirve como material para posteriores trabajos literarios, ya sean poemas, cuentos, novelas o ensayos.

En la tercera semana, el día martes antes de salir de vacaciones de Semana Santa, invitamos a ambos grupos a entrar en el mundo del Cuento con el escritor invitado, el cienaguero Clinton Ramírez; quien compartió la lectura ‘Método deComposición’ de Edgar Allan Poe junto a su famoso poema, ‘El Cuervo’.

En esta clase, se inscribieron en el taller tres nuevos estudiantes procedentes de la Universidad Sergio Arboleda.

Elementos del cuento Moderno, según Edgar Allan Poe

1. La brevedad: el cuento se lee en 1 sola sección de lectura. la trama es lo dominante. elementos al servicio de 1 único efecto. 2. La unidad del efecto: finalidad lograr 1 único efecto en el lector. efecto motivación del relato elementos a su servicio. cada palabra contribuye prepararse desde la 1° frase. graduarse hasta el final. personajes esenciales.

Ejercicio Destacado


La vorágine espesa cubre todo lo que puede ser visto es impotente penetrante y verde. Árboles enormes se despliegan ante mi vista, tapan el sol produciendo espectros por sus sombras. Parece que hubiera estado despierto una centuria. Mis ojos cansados, parpados hinchados y cansancio general me hace parecer uno de los tantos espectros proyectados por el bosque. 
Me mimetizo con ese verde tropical. El peso en mi espalda hace que mis pies se hundan en la pútrida marisma. Me dificulta caminar, parece que quisiera absorberme y fundirme con el ecosistema. Mi voluntad sigue en pie pero mi cuerpo no responde, parece que proseguirá a abandonarme. 
Cuentan que la selva se ha tragado a muchos hombres. Me niego a sufrir ese destino. Hablo con Dios y con el Diablo, negocio con ellos y reparto lealtades a cualquiera de los dos entes me permitan salir de la situación. 
Estoy ocupado en mis cavilaciones, de pronto la burbuja se rompe; un sonido metálico y rechinante inunda el ambiente, vuelvo a sacar energías. Camino y veo una explanada, hay un pequeño caserío , deambulo hacia el, recobro mi fe pero ya es tarde, al fin soy absorbido por esa tierra.

Andrés Fernando Gómez Pertuz

martes, 15 de abril de 2014

Poemas de David Martínez

I

Incierta noche, noche de iniciación
Revélame los cánones del tiempo,
Mira que supe del dolor agazapado,
 Y Penumbras merodean mi alma
Como  centellas en las calles de tu universo.

Iníciame, entonces, mi única amiga
Confidente de insomnes y vigías,
Iníciame, en los pertrechos del olvido
Donde abunde el no y la ceniza,
 Donde la pequeña muerte del recuerdo
Sea otro lucero Tras las luces citadinas.

¡Oh, Luna! Hija de la noche negra,
Negra como inescrutables sus ojos,
Ella se va para no volver, se va para no volver,
El dolor se levanta, La noche no habla.

Quemadas las fotos, tu figura revuelve las cenizas
Y no hay nada para agregar, 
Seré iniciado, en las artes del olvido.



La ciudad convulsa

La ciudad convulsa no regala
Ni un solo espacio
Ni un solo minuto;
Vuelves la mirada
Y has perdido la carrera.
El cielo sin estrellas y la noche
Melancólica llaman por ti.
En el patio, los pozos
se han desbordado de tristeza.
El mar apuntala el peso de las barcazas
Mar oscuro de oscuras tristezas.

¿Después de tantas metamorfosis,
Después de tantas crisálidas vacías

Aún sigo siendo el mismo?


Inspirados en 'La Muerte', cuento de Enrique Anderson Imbert

A continuación publicamos los trabajos realizados en la clase anterior con respecto al plagio Creativo. A partir de dos cuentos de Enrique Anderson Imbert, La muerte y el Suicida, partimos a realizar un texto con características similares:

La Muerte

Un día más soleado de lo normal en la playa grande, por eso quizás no habían tantos turistas. Juan, alto, moreno, sin expresión en su rostro, paseaba por ahí. Camila decidió ese día ir a leer en frente de la playa y disfrutar la vista e incluso el calor. A Juan le causa curiosidad que una chica halla ido sola a ese lugar a leer, entonces decide acercarse y le pregunta: ¿Por qué decides venir sola a la playa?, ¿no tienes amigos para venir a divertirte?
- He matado a todos mis amigos, he quedado sola.
Juan sonríe misteriosamente y la invita a bañarse en el mar. Juegan un rato, pero ella empezó a hundirse entre las pequeñas olas. Juan sale sonriente a la playa y desaparece.

Karol Diaz Magdaniel


Una Curva al fondo de mi muerte

Calor y sol, caminaba hacia la gran carretera
mis nervios aumentaban, no podía esperar
subiendo la gran pendiente perdia el aliento
miles de árboles sonrreían por mi azaña
estoy en la cima, frío por todo mi cuerpo
me lanzo hacia la perdida, bajo a toda velocidad.
Viento, asfalto, longboard y yo
llegó un momento de shok
una curva y al fondo, mi gran muerte.
Sigo cayendo hacia los brazos de la seguridad
mis piernas tiemblan, mi cabello baila
poco a poco vuelvo a sentir el ruido de las aves
he terminado
estoy vivo.

Jeison Montero


El muerto que se creía vivo

La carroza tenía amplios vidrios ahumados y un espejo en el techo; debía ser para que el pasajero con la escafandra de madera pudiera ser su condición de transición de un estado sólido a uno etéreo. No era muy diferente de la percepción que tenía el conductor del vehículo mortuorio, este conocía los senderos hasta el cementerio, sus pasajeros en cambio, no.

el pasajero que nos ocupa vio reflejado en los cristales una tonalidad naranja, característica de los atardeceres de abril y por esta vez reverencio el rito del sol al acostarse. El conductor venía pero no sentía nada: se creía vivo, pero estaba dead.

Juan José Martínez


La Muerte

Transitando por la autopista negra
al borde de la montaña gris
la automovilista, mirando por el retrovisor.
Ella blanca, muy pálida, como la nieve de nueva Hampshire
cabello, ojos y traje negro, los lucía con fervor.

Inocente niña que pide un aviento
montaña gris, húmeda y nublada
Inocente niña, inquieta, no aguanta y explota

¿Por qué recoges desconocidos? cualquiera te puede hacer daño
No tengo miedo de eso, dijo la automovilista con una voz seca

Inocente niña que quiere presentarse:
"Mucho gusto, soy la temida muerte"

Automovilista fría, sonríe de la manera más macabra
pero sutilmente posible
Estúpido auto que se vuela por el abismo
Estropicio incontrolable que se abraza la montaña

Inocente niña en su piscina roja de muerte
automovilista, camina y se va, alejándose como un viento frío
a través de los gigantes pinos.

Jeison Montero


La Muerte

Y se encontraba allí, La Muerte. Algo en mi imploraba que me alejara, pero ella, se veía tan tenue y hermosa, que hasta confianza me inspiraba y poco a poco me acercaba más a ella.
Sus mejillas pálidas y su cabello oscuro hasta la cintura, impedían que mi consciencia lograra librar ésta gran batalla entre caminar hacia ella o dar un vuelco que no tendría regreso.
En mi mente surgían tantas osas, tantas dudas que solo aquella pálida mujer podía aclarar. Y así fue, antes de llegar hacia ella, solo alcancé a preguntarle ¿por qué?. Minutos después solo sentí el estruendoso choque del automóvil, aquel personaje tomó mi mano, me miró con sus profundos ojos negros y desapareció.

Aura Cárdenas




lunes, 7 de abril de 2014

EL PLAGIO CREATIVO

La primera semana de abril trabajos el tema del ‘Plagio Creativo’ y sus ventajas a la hora de la creación literaria, pues qué mejor manera de empezar a escribir que, imitar a los grandes maestros, por ejemplo: Gabriel García Márquez utilizó el tono de Franz Kafka para iniciar sus escritos, también se apropió de ciertos métodos utilizados por William Faulkner, para narrar las historias de los pueblos.


Con ambos grupos leímos un poema y dos cuentos. Con el grupo del martes trabajamos el poema ‘Irreversibilidad’ de Charles Boudelaire; y dos cuentos de Enrique Anderson Imbert, la Muerte y el Suicida. Con el grupo del jueves, el mismo poema; y los cuentos, Continuidad de los parques de Julio Cortázar y Un marido sin vocación de Enrique Jardiel Poncela.



Después de haber leído los textos, dejamos para la próxima clase la actividad ‘Confusión de Cuentos’. Se trata de escribir un texto con elementos propios, basados en los textos leídos.